A menudo, los libros sobre videojuegos suelen decepcionarme bastante. Sí, hay algunos muy buenos (y muy bien escritos, por cierto) pero otros en cambio parecen estar hechos deprisa y corriendo, a menudo firmados por nombres conocidos en Internet a modo de reclamo. Con suerte, y en el mejor de los casos, hallarás algunos libros escritos por gente que domina el tema a tratar y poseen grandes conocimientos pero que, por desgracia, no cuentan con un buen apoyo empresarial detrás al no tener experiencia editorial previa.
Como si se tratase del producto de una moda que en los últimos tiempos no ha dejado de crecer, raro es el mes que no se anuncia un «nuevo libro sobre tal o cual franquicia». Para llevarse a casa un buen libro sobre ocio electrónico, hay que saber filtrar muy bien e intentar no dejarse llevar por el ímpetu e incluso por el hype (es difícil, lo sé). Es bueno y recomendable leer siempre antes diferentes opiniones de gente que ya haya leído la obra en cuestión y así evitar el llevarse desagradables sorpresas.
Por fortuna para los fans de este tipo de lecturas, pequeñas editoriales han nacido en los últimos años y día a día se están esforzando por mejorar y poner en circulación libros de la calidad mínima exigida. Algunas con sorprendentes (y grtificantes) resultados, por cierto. Otro recurso al que recurren muchos autores para sortear las trabas y las dificultades a la hora de publicar su libro, es el crowdfunding o la autoedición las cuales, en mayor o menor medida, están dando algunas alegrías a los aficionados al videojuego que desean hacerse con libros de este tipo. Mega Drive Legends, afortunadamente, es una de esas gratas sorpresas que en ocasiones se encuentra uno al buscar en las tiendas un buen libro sobre uno de sus hobbys favoritos.
Este libro, no sólo está realizado con muchísimo cariño hacia una consola que nos encandiló a muchos en nuestra niñez y parte de nuestra juventud; sino que además los autores implicados en él son verdaderos expertos en este sistema y su catálogo. Ello implica que han jugado a cientos de títulos, conocen al dedillo las industria (muchos de ellos han trabajado y/o colaborado con distintas compañías) y, aún hoy día, siguen escribiendo o realizando podcasts sobre videojuegos.
El principal artífice de esta obra, editada en nuestro país (en una edición impecable, todo hay que decirlo) por Game Press, no es otro que Raúl «The Punisher» Montón, ex-trabajador de la propia SEGA, jugón de pro y conocido de sobra por todos los amantes del videojuego clásico el cual, para la esta ocasión, se ha rodeado de un equipo de blogueros de auténtico lujo (algunos de los cuales conozco muy bien porque he participado con ellos en páginas web y podcasts) y de gente tan experimentada en el mundillo como Fran Friki, Jose André «Xtreme Retro» o la gente de Pulpofrito.com (un site sobre retrogaming y juegos actuales muy recomendable).
El libro, con una portada maravillosa de Dani «Vandrell», está editado en la editorial Game Press de Jose Ángel Ciudad (ex editor de la mítica revista Loading) y tiene una presentación impecable, la verdad. La presentación es impecable, con ese formato en tapa dura y de gran tamaño es todo un acierto. Aunque en su interior se habla de modelos, periféricos, curiosidades y de nombres asociados a su historia (como Yuzo Koshiro o Yuji Naka), quizá peca demasiado de querer centrarse en el software de la máquina pero, qué demonios, ¿acaso no son los juegos los que hace granden a una consola? Además, ¿quién no quiere leer sobre 154 leyendas de esta consola y, por ende, de la historia del videojuego? El libro, en una primera tirada contenía una errata que ya ha sido subsanada en reediciones posteriores (que son las únicas que actualmente se pueden conseguir en las tiendas) y además los ocho autores compensaron a los compradores con una página extra sin dicha errata y con material exclusivo en formato digital. Así, sí se hacen las cosas. Mega Drive Legends incluye también una jugosa entrevista a Paco Pastor (cofundador de Erbe y figura clave de SEGA en España a principios de los noventa). En resumidas cuentas, un libro hecho por y para los amantes de un sistema de ocio electrónico que cautivó a los niños y jóvenes de toda una generación y que sin duda hará que sueltes más de una lagrimita mientras lo lees.