En los últimos tiempos, hemos visto proliferar grandes series dentro del sello Image (actualmente, el mejor repositorio de grandes series y autores que se pueda encontrar en la industria norteamericana del cómic) y, cuando hicimos nuestro repaso de los imprescindibles del año pasado de esta editorial (tanto en grapa como en TPB) prometimos dedicar un rinconcito especial a una obra que nos había cautivado de manera especial.

Se trata de ‘Injection‘, cuyo equipo creativo destila calidad por los cuatro costados, siendo el gran escritor Warren Ellis (su guionista) y el talentoso Declan Shalvey (Moon Knight: From the dead) sus principales baluartes; pero sin olvidar a la excepcional colorista Jordie Bellaire (raro es el día que no aparece por esta web) que son los responsables de que esta obra posea la inmesa calidad de la que hace gala página a página.

Destacada Injection

Sucede que, en ocasiones, sólo por determinados autores, uno ya podría imaginar que hay obras que atesora momentos geniales y que su lectura debería ser obligada. A veces, en el mundo del noveno arte, no ocurre eso. Afortunadamente, en esta ocasión sí se cumple dicha máxima y nos encontramos un primer tomo recopilatorio muy recomendable. Personalmente, estoy encantado con todo lo que ofrece pero, si bien es cierto que es una obra que está bastante bien realizada en su conjunto, al llegar al final del quinto número, he tenido esa extraña sensación de «espero que todo esto acabe bien y no me defraude el final», porque sinceramente espero que el desenlace esté a la altura de lo hasta ahora mostrado. Es parte del encanto de Ellis (para bien o para mal) ya que sus obras generalmente empiezan siempre muy bien pero nunca sabes como acabará la cosa.

«Injection» es uno de esos cómics que reúne elementos que todo buen aficionado a las historias de géneros como el misterio, lo sobrenatural o la ciencia-ficción demanda. Y no sólo eso, sino que podría decirse que es casi un thriller con tintes conspiranoicos por momentos, dada la innata habilidad de Ellis a la hora de construir tramas e introducir diferentes aspectos y situaciones con los personajes en los cinco primeros números que incluye el TPB USA que tenemos ahora mismo en nuestras manos (N.D.R.: Finalmente, en España lo ha publicado Norma Editorial con el nombre de «Inyección»)

Narrativa brutal

Estando Ellis de por medio, debemos avisar que la historia tarda en arrancar, pues ya sabemos que el guionista británico gusta de crear tramas enrevesadas, dotar de complejidad a los personajes y, en definitiva, de necesitar varios números para mostrarnos todo lo que va «cocinando» en esa privilegiada cabecita suya. Y es que, mientras guionistas como Mark Millar entran en tu mente como un elefante en una cacharrería (o como John McClane en el edificio Nakatomi, que diría nuestro querido y admirado Cels Piñol) el amigo Warren, para bien o para mal, cocina a fuego lento. Pero en esta historia nos deja buen sabor de boca, ya que el lector desde el primer momento quiere saber más de sus protagonistas y de ese lugar llamado «El otro mundo» (The Another World, en el original)

La historia, que continuamente salta del presente al pasado mediante el uso de flashbacks, nos presenta a un grupo de personajes que, aparentemente, son más de lo que parece a simple vista. La misteriosa doctora Maria Kilbrade, la cínica experta en computadoras, Brigid Roth, el letal agente Simeon Winters, el enigmático genio precognitivo Vivek Headland y, como no, Robin Morel (muy importante para la trama y al que, aunque a él no le entusiasma precisamente, podríamos denominar como «El Mago», ya que proviene de una familia con una gran tradición en el dominio de las artes esotéricas y un profundo conocimiento de los seres sobrenaturales del folclore británico). Juntos conforman «La Unidad» (Cross Culture-Contamination Unit), trabajando para el FPI y el «Ministry of time and Measurement».

The Other World

Partiendo de un experimento del Cursus liderado por Kilbrade para crear vida artificial alterando todos los parámetros científicos conocidos, con la inclusión de Robin Morel en el grupo, encuentran el modo de introducir una conciencia en la máquina de IA rompiendo las leyes de la física. Así, surge el Proyecto Injection. Pero, ¿qué se esconde realmente detras todo esto? ¿Por qué esos tatuajes? ¿Qué es la Athame? Sin querer desvelar mucho, en algún punto del experimento, algo salió mal y el propio tejido de la realidad se vio comprometido. Una vez más, como en el pasado, tendrán que trabajar juntos en solucionar sus diferencias en pos de un bien mayor, ya que sus extrañas creaciones han comenzado a propagarse por nuestro mundo. Mezclar ciencia-ficción con magia en dicho experimento no fue buena idea. Muchas cuestiones surgirán entonces en torno a «The Other World» y el control de la Electricidad (uno de los cuatro poderes principales del Universo).

Los dibujos de Shalvey rayan a un gran nivel, mucho más inspirado que en su Caballero Luna (lo cual es mucho decir ya, pues lo que hayáis leído dicho cómic sabréis de lo que hablo). A este excepcional artista no se le puede poner ninguna pega, ya que está fantástico en los cinco números que componen el tomo. Si a un grandísimo trabajo al dibujo, le sumas el buen hacer y la profesionalidad de Jordie Bellaire, el apartado gráfico es simplemente sobresaliente. El color es uno de los mayores atractivos del cómic, que visualmente es una gozada. En este sentido, vais a disfrutar muchísimo. Además, la narrativa gráfica es increíblemente buena. Declan Shalvey es un excelente dibujante de cómics (para muestra, las imágenes que os dejo a continuación) y el nivel se mantiene a lo largo de todo el tomo.

Letal Injection

CONCLUSIONES

Hablar de todo lo que ofrece Injection es, en ocasiones, harto complicado. Estamos ante una obra que no deja a nadie indiferente. Injection es un cómic que va a hacer las delicias de muchos pero, por otro lado, algunos lectores que se acercarán a él por recomendación de los primeros, pueden quedar tremendamente decepcionados; sobre todo si no están acostumbrados a Warren Ellis y su estilo novelesco por momentos y, también, algo cinematográfico a veces. Injection, al igual que ocurría con series de TV como ‘Fringe’ o ‘Perdidos’, es una historia llena de interrogantes que trata fundamentalmente de los personajes y cuya tramas transitan hábilmente entre varios géneros, desconcertando de manera premeditada a los lectores.

El guionista nos encamina hacia algo grande con paso lento pero firme, dejando en cada número miguitas de pan para que las sigamos. Siendo totalmente sincero, cinco números me han sabido a poco. Necesito saber más de este cómic que está pidiendo a gritos una adaptación televisiva. ¿Estamos ante lo que podría ser una futura obra de culto? Confiemos en que, al final del camino que se nos muestra, tengamos todas las respuestas que nos vamos haciendo a medida que avanzan los números. Eso sí, yo de ti, por si acaso, le daría una oportunidad ya. No sea que luego te arrepientas.