Crítica del disco «Schizophonic», de Nuno Bettencourt

En 1996, Nuno Bettencourt, el guitarrista de la conocida banda norteamericana «Extreme«, sorprendía a propios y extraños con un increíble álbum llamado “Schizophonic”. Un extraordinario disco, que posiblemente sea desconocido para la mayoría de los seguidores del Rock. Incluso, puede que haya fans de Extreme (la banda madre de Nuno) que no hayan disfrutado de las excelencias del mismo. Por ello, paso a contaros a continuación todo lo bueno que tiene (que es mucho) este fantástico LP de bizarro nombre y fantásticas canciones.

Nacido de la portentosa mente musical del guitarrista Nuno Bettencourt (20 de septiembre de 1966 en Praia da Vitoria, en la Isla de Terceira, Portugal), en un período en el cual el movimiento musical denominado grunge estaba dando sus «últimos coletazos» (y las bandas que una vez se acercaron a dicho estilo iban a empezar a abandonarlo progresivamente para centrarse en sonidos más clásicos), es sin duda uno de los mejores discos de Rock que podéis añadir a vuestra colección.

A finales de los noventa, muchos grupos comenzaron a denominar a su música cómo «Rock», simple y llanamente. Lo hicieron de manera deliberada para alejarse de ciertas etiquetas. Para otras bandas, 1996 fue un año bastante raro (para Metallica, por ejemplo; los cuales sacaron «Load» y sus fans no lo acogieron de buen grado). En lo referente a «Extreme«, tras «Waiting for the Punchline» (1995) la banda se separó (temporalmente) y un montón de ideas que pululaban por la inquieta mente de Nuno Bettencourt iban a quedar relegadas al olvido si no ponía remedio. Lo cierto es que el disco es una obra muy personal de Nuno, nunca podría haber sido concebida como un disco de la banda de Malden, Massachusetts pero si permitió al excelso guitarrista dar rienda a toda su creatividad como compositor.

El disco, editado por A&M Records y grabado en diferentes estudios con producción del propio Nuno, comienza con una sensacional “Gravity”, un tema de guitarras distorsionadas y pegadizas melodías en el cual el guitarrista se destapa con un alucinante solo que pone sobre la mesa la maestría y el talento de Nuno a las seis cuerdas.

Le siguen temas como el «nirvanero» «Swollen Princess» (con la colaboración de ‘The Great Mancini’) o «Crave«, uno de los mejores temas del álbum junto con «Fallen Angels«. Nuno se encarga de las voces, las guitarras y el bajo y Anthony J. Resta de la programación y la percusión. Entre otras colaboraciones, como artista invitado el gran Gary Cherone nos deleita con su asombrosa voz en el tema «You«.

Técnicamente, el disco es impecable y Nuno se muestra grandioso en cada una de las quince canciones que lo conforman. La guitarra de Nuno pasa de salvaje y colérica como en «Two wees in Dizkneelande» a emocionarnos en «Pursuit of Happines. Otro momento álgido del álbum es “What You want” es un auténtico pelotazo con un riff hard-rockero de alto voltaje y un solo que es para quitarse el sombrero. «Karmalaa» es un derroche de genialidad y tampoco me gustaría dejar de lado en esta crítica un tema tan tremendo como es «Note On The Screen Door«.

Como curiosidad, la «supuesta chica» que aparece en la portada… ¡Es el propio Nuno travestido! Dicho detalle, aporta aún más excentricidad si cabe al arte del álbum que cuenta con unas peculiares fotografías en el interior del libreto.

En esencia, un trabajo digno de estar en la discografía de todo buen rockero o amante de la buena música en general, ya que uno de los aciertos de «Schizophonic» es que gustará tanto a los puristas del género como a todos aquellos ajenos al mundillo que se animen a darle una escucha. Gran producción, buenas letras, canciones Rock de calidad, algo de Grunge, melodías Pop, y solos «made in Nuno» es lo que te vas encontrar en este formidable disco. Una de esas joyas musicales que no debes dejar escapar jamás.

‘VIDEOCLIP’ [CRAVE]