¿Y si el mundo que conoces es sólo un reflejo de muchos otros? ¿Y si la realidad en la que vives fuese tan sólo un sueño más? Joe Manson es un niño débil y enfermizo que sufre de diabetes. Su padre murió y su madre no es lo que se dice la mejor madre del mundo, aunque cuida de él. Para colmo, sufre bullying en la escuela y prácticamente no tiene amigos así que el único lugar donde es realmente feliz es en la soledad de su habitación. En su pequeño refugio, encerrado en su propio mundo. Un mundo que está a punto de cambiar para siempre

De la mano del genial guionista Grant Morrison (Flex Mentallo, Los Invisibles) y el excelso dibujante Sean Murphy (Punk Rock Jesus, Chrononauts) nos llega esta colección de 8 números del sello Vertigo recogida en un tomo integral publicado en España por ECC Ediciones. Una auténtica oda a la fantasía y a la imaginación que nos pondrá en la piel de Joe para vivir la más alucinante de las aventuras. ¿Preparados para saber más sobre la leyenda del niño moribundo?

Jack speaks!

Nuestro protagonista es un chico casi sin vida social, que se refugia en su bloc de dibujos, su mascota y sus juguetes. Vive angustiado por la pérdida de su padre y además está sobreprotegido por la madre debido a su enfermedad la cual, de no ser controlada en cada comida, podría provocarle un coma insulítico. Partiendo de esta premisa, era cuestión de tiempo que Joe acabase encerrado en su propia realidad alternativa. Así, una noche de tormenta y sin explicación alguna, Joe es transportado a un mundo de fantasía en el que, de pronto, todo carece de sentido. Pero la pregunta es: ¿Y si en lugar de ser sólo un mundo salido de la fértil imaginación de un niño, éste existiese en realidad?

Conforme avanzamos en su lectura, el cómic nos muestra una y otra vez fragmentos de los dos mundos, sin dejar realmente claro si realmente Joe ha inventado un mundo donde cada animal, persona y cosa tiene su mágica contrapartida soñada por él o, por contra, lejos de estar alucinando de veras hay un mundo mágico más allá del velo y éste posee el poder de coexistir en ambas realidades al mismo tiempo. Para averiguarlo, tendremos que llegar al final de este alucinante cómic.

A estas alturas, hablar de Grant Morrison parece hasta algo trivial, ya que poco más podemos decir del genio inglés que no hayamos dicho ya. Para muchos está considerado como uno de los mejores guionistas de cómics de nuestro tiempo y no seré yo quien les quite la razón. Su trayectoria profesional le avala y aquí construye una fábula deliciosa, triste en algunos momentos, pero llena de diálogos maravillosos y situaciones sorprendentes muy bien planteadas que se aleja bastante de otras obras suyas de corte más «lisérgico», a pesar de contener también esos pequeños momentos de desconcierto para el lector que son marca de la casa.

En cuanto al dibujo, Sean Murphy realiza un trabajo sencillamente espectacular, como es habitual en él. Dibuja tanto escenarios reales como mundos de fantasía con una maestría asombrosa, casi sin despeinarse, y es una gozada verle aquí dibujar dinosaurios de todo tipo, enanos piratas, magos oscuros, ratas guerreras antropomórficas que manejan espadas y un sin fín de criaturas de diversa índole. Mención aparte merecen los guiños a superhéroes de editoriales como DC Comics y a los famosos robots y soldados licenciados por la compañía juguetera Hasbro.

Murphy impresiona como siempre
La suerte de tenerlo en este cómic es que, aparte de es una auténtica máquina dibujando, narra como los ángeles y posee un estilo personalísimo. Es uno de esos grandes artistas capaz de mezclar en una misma página varios elementos que no tienen nada que ver y que no sólo desentone, sino que además la cosa cobre sentido. Y eso en un cómic de estas características es fundamental, por eso pienso que es el artista idóneo para esta obra.

Sin duda, es una obra altamente recomendable, en la que Joe deberá averiguar por qué algunos habitantes de esa extraño mundo al que se ha visto obligado a viajar de manera súbita le conocen como «el niño moribundo», el largamente esperado salvador que derrocará al malvado Rey Muerte y devolverá la luz al mundo. Una misión le será encargada y la senda de la aventura se abrirá ante él. Por el camino, se cruzará con todo tipo de seres y se verá acompañado de extraños aliados, con los que vivirá situaciones increíbles. Como no podía ser de otra manera, el desenlace de este cómic (con clara inspiración en obras de la literatura universal como, por ejemplo, «El Mago de Oz«) no dejará al lector indiferente.

Estamos ante un cómic muy especial, que sabe tocar la fibra del lector a medida que avanzamos en su lectura. El gran encanto de esta obra reside en cómo el guionista construye una entrañable historia de superación que emociona al lector de principio a fin. Puede que Morrison y Murphy no inventen nada nuevo pero la propuesta que ejecutan aquí con maestría estos dos genios del noveno arte hará las delicias de aquellos que se atrevan a acercarse a la misma. Juntos nos llevarán de la mano a un mundo mágico paralelo en el que tendremos que descubrir al héroe que llevamos dentro. Y, para ello, tendremos que librarnos de las ataduras en ocasiones impuestas.