Mientras que en España andamos aún inmersos en las Secret Wars, con todo el lío de Dr. Doom (aquí bautizado «Dr. Muerte», gracias por tanto, Vértice y Forum) convertido en un dios omnipotente pero no omnisciente, el profeta, los mundos de batalla, el Hombre-Molécula, Valeria y unos cuantos enredos y dislates más; en la tierra de las libertades ya se han estrenado algunas de las series regulares que conformarán el nuevo y diferente Universo Marvel. Hoy toca hablar de uno de los reinicios a priori más interesantes de estas «All-New, All-Different» colecciones: Los Guardianes de la Galaxia.

Los personajes cósmicos de La Casa de Las Ideas vuelven a empezar desde el número uno, de nuevo de la mano del guionista Brian Michael Bendis (que ya ha trabajado con más o menos acierto en la anterior etapa, con sus cosas buenas y sus cosas malas) y esta vez acompañado del llamativo estilo del dibujante Valerio Schiti y del colorista Richard Isanove. Un equipo creativo de garantías para afrontar esta prometedora nueva andadura del grupo de héroes galácticos de Marvel Comics, el cual cuenta ahora con nuevos e interesantes integrantes.

Chitauri

En este primer número veremos como los nuevos Guardianes de La Galaxia se topan con los Chitauri (estos seres cada vez están tomando más protagonismo dentro de la facción cósmica de Marvel debido a las películas del UCM) los cuales logran arrebatarles un orbe que contiene un objeto de (supuestamente) mucho valor; ya que esta raza lo custodiaba con fuertes medidas de seguridad. Nuestros héroes no se atreven a abrirlo en la nave y, por supuesto, ni por asomo quieren llevarlo a la Tierra. Después que la adorable cosa de ojos azules y sobrino predilecto de la tía Petunia siembre la inquietud entre los guardianes con un comentario sobre el sempiterno «Guantelete del Infinito», los guardianes deciden hacer una visita a un viejo conocido que ahora vive (y manda) en el planeta Spartax.

La cosa (nunca mejor dicho) empieza realmente bien en este primer número y estos (gracias al cine, no lo olvidemos) ahora famosos caracteres de La Casa de las Ideas arrancan nuevo periplo en este nuevo universo de una manera dinámica y divertida, como sólo ellos podrían hacerlo. Y además, lo hacen con nueva e interesante formación compuesta por:

  • Drax, el destructor
  • Groot
  • Venom
  • Mapache Cohete
  • Kitty Pride como la nueva y flamante (Star-Lord)
  • Ben Grimm (A.K.A. «La Cosa»)

Y un par de sorpresas más que veremos a continuación.

The giardian Thing

Sin duda, la novedad más importante dentro del equipo es la de La Cosa de Los 4 Fantásticos que, sorprendentemente, no desentona para nada en el mismo. Es más, Bendis (que podrá tener sus idas de olla y sus rarezas, como sabemos todos) se encarga de «justificar» la presencia de Ben Grimm en esta formación al principio del cómic con una explicación de lo más coherente y sencilla. Además, en este nuevo comienzo habemus nuevo líder de grupo. Líder mutante y mujer, de las de armas tomar. Nada más y nada menos que la sin par Kitty Pride, asumiendo el rol de Peter Quill comandando a los guardianes y demostrando que es una excelente Star-Lord. Y a todo esto, ¿qué ha sido del bueno de Peter? ¿Por qué no está con sus compañeros viviendo alocadas aventuras espaciales? Pues muy sencillo, sus obligaciones como regente de Spartax le tienen muy ocupado. Y aburrido, tremendamente aburrido de sus quehaceres diarios. Ni los intereses amorosos de peculiares princesas de otros mundos mejoran su estado de ánimo.

peter quill
«Tú a lo tuyo, Peter…»

De ese modo, los guardianes llegan al planeta de Quill para pedir su ayuda y abrir así el contenedor que han robado a los Chitauri cuando entra en escena Gamora, la cual literalmente cae de los cielos y está muy malherida. Ha entablado una violenta lucha con una entidad denominada Yotat, la destructora de mundos; la cual resulta ser nada más y nada menos que… Bueno, eso tendréis que averiguarlo vosotros leyendo esta nueva serie que, como dije al principio pinta realmente bien. El amigo Brian Michael Bendis está cumplidor y el dibujo de Valerio Schiti es francamente bueno, una gozada verle dibujar las andazas galácticas de estos personajes con su característico estilo. Por cierto, «portadón» en este primer número del genio Arthur Adams para la que puede ser una de las grandes sorpresas de esta nueva etapa del universo Marvel actual, de la cual ya se están viendo algunos aciertos y algunas decepciones. Esta nueva colección parece (de momento) estar dentro de los aciertos y ciertamente nos deja con ganas de más para el segundo número. ¿Qué nos tendrán preparado Bendis, Schiti y compañía para esta nueva encarnación de los héroes más molones de la galaxia?